Asi que este bocado de Cristo se queda en el aire. Esta mano de Cristo está eternamente expuesta, asi, este no lo puede tomar, porque está ocupado. Ésta es una imagen muy fuerte que a través de la Providencia del pontificado de Juan Pablo II. No es lo que yo quisiera, sino que es lo que me viene dado. Cuando nosotros queremos demasiado, no podemos acoger porque estamos ocupados. Cristo tiene este bocado y los apóstoles se preguntan soy acaso yo. Hay un grande dinamismo yo, tu. Un grande movimiento y Cristo con este bocado. Así, Dios espera alguno libre, porque están ocupados. Dios ofrece. Pero al final se llega a una humanidad auto realizadora. Y Judas es exactamente una imagen de esto, de ir tras los propios proyectos. Porque nadie tiene las manos libres.

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Si tu tienes las manos llenas de bananas pero Dios te quiere dar naranjas, porque para tu salud son mejores las naranjas, tu no lo puedes tomar porque tienes las manos llenas de bananas. Esta es la imagen en sustancia.